miércoles, 27 de abril de 2011

Ojos de Pomo

En una de tantas clases en las que prestar atención, no era algo que me atrajese, empecé a mirarme en el pomo de la puerta situada detrás de mí. Me distraía viendo como podía hacer resaltar las partes de mi cara, y ver mi mano gigantesca reflejada en él. A ratos, miraba al profesor asegurandome de que no se estuviera dando cuenta. Por miedo a que me viera, me senté de lado apoyada en la pared, desde la que podía seguir mirándome en el pomo.
Desde esa perspectiva podía ver al chico que se sentaba a mi lado reflejado en él. En ese momento empecé a darme cuenta de que era bastante guapo, y que empezaba a resaltar partes positivas de él, que nunca había visto. Entonces dejé de mirar el pomo, y mirandole a él, de repente dejó de gustarme, dándome cuenta de que al igual que yo resaltaba las partes que quería de mi cara en el pomo, también se habían resaltado las partes que yo quería ver de esa persona.
Desde ese momento entendí que enamorarse es ver solo las partes positivas y atractivas a tus gustos de esa persona, tapando sus defectos y equivocaciones, llamándole ahora a los enamorados; ``Ojos de Pomo´´.